Maximiliano, que con tus palabras y actitudes alentaste siempre la esperanza en tus compañeros de la prisión y no dudaste en entregar tu vida para salvar a uno de ellos, pedíle a Jesús que nos anime a dar la vida, como vos, por los demás, y a ser, para otros, motivo de esperanza.
Comentario a la homilía del Papa Juan Pablo II en la misa de canonización el 10 de octubre de 1982.
Películas que recrean la vida de San Maximiliano Kolbe: