Evangelio según san Lucas 2, 22-40
Jesús nos enseña que la esperanza SIEMPRE ES POSIBLE. Simeón esperó hasta su vejez, y murió en la paz de haber visto a nuestro Salvador. (Cuando todo parece no tener fin, ten fe y espera en el Señor)
SEÑOR JESÚS: ¡QUE NUESTROS OJOS PUEDAN VER LA SALVACIÓN!