Hoy, 20 de septiembre de 2019, en la homilía de la Misa en la Casa Santa Marta, el Santo Padre meditó en torno a las Lecturas de la Liturgia de ayer y de hoy, centrándose en los consejos que el apóstol Pablo da al joven obispo Timoteo.
“¡No te olvides de tu gente, no te olvides de tus raíces! Y ahora, como obispo y como sacerdote, debe estar siempre cerca del pueblo de Dios. Cuando un obispo rompe con el pueblo de Dios termina en un ambiente de ideologías que no tiene nada que ver con el ministerio: no es un ministro, no es un siervo. Ha olvidado el don – gratuito – que le fue dado”.