Y es justo perderla por vos, entregarla, comprometerla. Vos lo hiciste con nosotros y te llenaste de resurrección y nos llenaste de vida eterna. Hoy andamos mezquinos y perdedores, por querer ganar perdemos mucho. Pero la fiesta de tu Cuerpo y Sangre, nos devuelve a lo mejor, a Vos, a tu entrega, a nuestro triunfo.




