La Buena Noticia se revela cuando los ciegos ven, los cojos andan y los sordos oyen. El amor no necesita largos discursos para demostrar su importancia; basta con que sea fuente de gozo, placer, don y vida. La fe se conjuga en voz activa.
Ante la suegra enferma de Simón, “se inclinó sobre ella”. Ante la aglomeración de la multitud, no pierde de vista al hombre, sino que se aproxima a la realidad de cada uno: “imponiendo las manos, los curaba”. No siente aversión ni toma distancia del sufrimiento, sino que, con una inmensa
La fe es una práctica que se modela en la escuela del seguimiento de Jesús, quien nos muestra, en su obrar, los gestos distintivos de un corazón misericordioso.