Dios, Padre de nuestro Señor Jesucristo,
que en Él y para Él manifestaste bienaventurados
a los que tienen hambre y sed de justicia,
y a los perseguidos y ultrajados por causa suya,
te imploramos que la Iglesia en Argentina
recoja y siga haciendo fecunda
la siembra evangélica de los Siervos de Dios
Enrique Angelelli, Carlos de Dios Murias,
Gabriel Longueville y Wenceslao Pedernera.
Te pedimos la gracia
de ver proclamados sus nombres
entre los mártires de tu Iglesia.
Que sus vidas y muertes
como testigos de la fe en Jesús,
afiancen por tu Espíritu la esperanza
en el corazón de tu pueblo,
para que, peregrinando hacia el Tinkunaco final,
construya la paz en la justicia y el amor.
Amén.
POR LA JUSTICIA QUE CLAMA AL CIELO POR TAMAÑA MONSTRUOSIDAD
NO QUEDARAN IMPUNES
CRISTO SIEMPRE VENCE
GLORIA Y HONOR A LOS MARTIRES DE LA RIOJA
AMEN