Cuarto día: El don del consejo para poder aportar una palabra de vida en el camino
Oración inicial: Se enciende la vela.
Espíritu Santo que vives en el corazón amante de cada uno, ilumina nuestro camino para que, en el momento de tomar una decisión difícil, de afrontar problemas familiares y comunitarios, de superar alguna crisis personal o de acompañar a algún amigo o amiga, sepamos escucharte y poner esa palabra que regale vida y paz, buscando siempre descubrir el bien de nuestros hermanos.
Para reflexionar:
El don del consejo es la sabiduría práctica. Encontrar la palabra adecuada para tomar la decisión justa en el momento oportuno. Ubicarse ante las cosas con equilibrio y, al elegir, tener en cuenta los criterios del Evangelio. Saber dar consejo a los demás es ejercer la delicada tarea de entrar cautelosamente en el santuario del otro, con plena conciencia de que «es otro» con su historia, su personalidad, su fe, sus angustias, sus miedos, sus frustraciones y todo un ser distinto.
A cada invocación respondemos: Ven Espíritu Santo y danos tu luz.
- En las situaciones de oscuridad…
- Cuando la vida nos confunde…
- Frente a los temas conflictivos…
- Ante el temor a equivocarnos…
- En medio de la duda…
Leemos en la Biblia (para la oración personal): Carta de san Pablo a los Efesios 1,11- 14
Gesto para acompañar la oración: Realizar este día de oración con los chicos, los estudiantes, etc. En los patios, salones. También podemos ofrecer nuestros guardapolvos, pintores, agendas, carpetas o cuadernos.
Oración final
Espíritu Santo, tenemos la asombrosa experiencia que estás siempre con nosotros y que nunca nos dejas solos.
Vivifica nuestra memoria agradecida para seguir descubriendo y aprendiendo de lo dones con los que das belleza a nuestra Iglesia Particular.
Muévenos a sentir con el Papa Francisco y con toda la Iglesia Universal para crecer en comunión, participación y misión.
Confiamos en vos.
En este Sínodo, enséñanos a escucharte, a escucharnos, a dialogar y a compartir.
En este Sínodo inspíranos para ver, sentir, pensar y obrar, de una manera nueva.
En este Sínodo anímanos a ser creativos en la Evangelización y en la Catequesis.
Amen.
Dios te Salve María, llena eres gracia…
María de Luján, esperanza de nuestro pueblo, ruega por nosotros