Cómo no sentirnos amados, cómo nos amarnos a nosotros mismos si hay un designio maravilloso que nos abraza y nos hace sentir vivos, amados, confiados. Sobre todo en esos días de cachetazos, baja autoestima y todo lo que nos oprime, recordemos que somos una obra formidable, únicos, bellos, suyos.