Séptimo día: El don de piedad como entrega total en las manos del Padre
Oración inicial: Se enciende la vela.
Espíritu Santo que vives en el corazón inquieto de todo hombre y mujer, regálanos, mediante el don de ciencia, descubrir en la creación que nos has dado los trazos del amor de Dios, quien habla a través del lenguaje de la belleza, y sea para nuestro caminar un permanente descubrimiento de la novedad del Evangelio que nos llama a dignificar la vida de todos.
Para reflexionar:
Hablar de ciencia es algo muy distinto de lo que significa la sabiduría y el entendimiento. Con el don de ciencia podemos penetrar en los recónditos parajes de la comprensión de las leyes de la naturaleza y de la estructura del universo contemplando la belleza de la perfección que dio vida a esa misma naturaleza y que creó el orden inalterable que rige el universo.
A cada invocación respondemos: Ven Espíritu Santo y danos el don de ciencia
- Para dar solidez a nuestra fe…
- Para acompañar nuestro trabajo y estudio…
- Ante la incertidumbre…
Leemos en la Biblia (para la oración personal): Génesis 1, 26-28
Gesto para acompañar la oración: Realizar con nuestro Sacerdote una oración especial con Su Estola en las manos signo del Pastor.
Oración final
Espíritu Santo, tenemos la asombrosa experiencia que estás siempre con nosotros y que nunca nos dejas solos.
Vivifica nuestra memoria agradecida para seguir descubriendo y aprendiendo de lo dones con los que das belleza a nuestra Iglesia Particular.
Muévenos a sentir con el Papa Francisco y con toda la Iglesia Universal para crecer en comunión, participación y misión.
Confiamos en vos.
En este Sínodo, enséñanos a escucharte, a escucharnos, a dialogar y a compartir.
En este Sínodo inspíranos para ver, sentir, pensar y obrar, de una manera nueva.
En este Sínodo anímanos a ser creativos en la Evangelización y en la Catequesis.
Amen.
Dios te Salve María, llena eres gracia…
María de Luján, esperanza de nuestro pueblo, ruega por nosotros