Hace falta valor para caminar, para avanzar más allá. Es una cuestión de amor. Hace falta valor para amar. Me gusta recordar la reflexión de un celoso sacerdote sobre este tema, que también puede ayudarnos en nuestro trabajo en la Curia. Dice que es difícil volver a encender las brasas bajo las cenizas de la Iglesia. La dificultad, hoy, consiste en transmitir la pasión a quienes hace tiempo la perdieron. Sesenta años después del Concilio, seguimos debatiendo sobre la división entre “progresistas” y “conservadores”, pero esta no es la diferencia: la verdadera y principal diferencia está entre “enamorados” y “acostumbrados”. Esta es la diferencia. Y sólo los que aman pueden caminar.
Papa Francisco a la Curia Vaticana – 21/12/2023