(Vastican News) A partir del próximo 1 de septiembre, se pondrá en marcha una nueva política unificada para las inversiones financieras de la Santa Sede y del Estado de la Ciudad del Vaticano.
Inversiones alineadas con las enseñanzas de la Iglesia
«La nueva Política de Inversión – se lee en el comunicado de la Secretaría para la Economía – pretende garantizar que las inversiones estén orientadas a contribuir a un mundo más justo y sostenible; protejan el valor real del patrimonio de la Santa Sede, generando un rendimiento suficiente para contribuir de forma sostenible a la financiación de sus actividades; y estén alineadas con las enseñanzas de la Iglesia católica, con exclusiones específicas de inversiones financieras que contradigan sus principios fundamentales, como la santidad de la vida o la dignidad del ser humano o el bien común».
Por esta razón, prosigue el comunicado, es importante que dichas inversiones «se dirijan a actividades financieras de carácter productivo, excluyendo las de carácter especulativo y, sobre todo, se guíen por el principio de que la elección de invertir en un lugar y no en otro, en un sector productivo y no en otro, es siempre una elección moral y cultural».