1º SÍNODO ARQUIDIOCESANO – EVANGELIZACIÓN Y CATEQUESIS HOY

2º Encuentro Presinodal

Este sábado 12 de noviembre representantes de 40 parroquias, de 21 colegios (15 del arzobispado y 6 de congregaciones religiosas), de instituciones y movimientos laicales, junto a sacerdotes, diáconos, consagradas, consagrados, seminaristas, miembros del Consejo de Pastoral Arquidiocesano, de la Junta Arquidiocesana de Catequesis y de la Pastoral de Juventudes nos congregamos en el Colegio Parroquial de Mercedes para el segundo Encuentro Presinodal camino al Primer Sínodo Arquidiocesano «Evangelización y Catequesis Hoy».

Puede ser una imagen de 6 personas, personas de pie, personas tocando instrumentos musicales e interior

284 personas compartimos juntos este encuentro, que tenía como objetivos: presentar el contenido del Compendio que define y guía la realización del Sínodo Arquidiocesano, motivar a la participación de las comunidades en el Sínodo y animar a que se dé a conocer en cada comunidad lo trabajado en los presínodos 1 y 2.

La jornada comenzó con una presentación a cargo de la Secretaría General acerca del camino sinodal recorrido, repasar lo vivido en el primer encuentro presinodal del pasado 2 de julio y explicar el por qué de este segundo encuentro.

Compartimos un video del Papa Francisco sobre la sinodalidad, y luego el Equipo de Espiritualidad, nos ayudó a rezar en comunidad en un profundo momento de oración, desde la Palabra y pidiendo la asistencia del Espíritu para este camino que hacemos juntos.

Más tarde, se realizó una presentación general del compendio, se presentó a los integrantes del Equipo Coordinador del Sínodo y referentes del área de Comunicación, presentaron el Logo Oficial, sus características, significado y todo lo que eso representa.

Luego de este momento, los participantes trabajaron en grupos menores realizando una lectura general del compendio, para definir a partir de esa lectura, dudas e inquietudes que fueron surgiendo respecto a la realización del Sínodo y reflexionar entre todos acerca de las condiciones que deberían reunir los sinodales para representar a sus comunidades; todo lo cual fue compartido en el Plenario realizado luego del almuerzo.

El encuentro finalizó con las palabras del Padre Obispo Jorge Eduardo, quien animó la reflexión diciendo:

»El Sínodo lo hacemos para ver cómo hacemos para que la Buena Noticia nos llegue y llegue a otros, nos evangelizamos para evangelizar».

«Para llegar a conclusiones sustanciosas tenemos que organizarnos para que se exprese la Iglesia, el Pueblo de Dios, todo el que quiera participar».

«El Sínodo es una experiencia de Dios, de Iglesia, del Espíritu, para que como pueblo de Dios, aprendamos a dialogar juntos y juntos enamorarnos de este mundo para anunciar a Jesucristo muerto y resucitado», subrayó.

Finalmente, el Arzobispo agradeció el trabajo del Equipo y a todos los presentes, recordando que es muy importante que tomemos conciencia que tenemos la oportunidad de decidir juntos, en todas las instancias que tenemos, cómo es el camino de la «Evangelización y la Catequesis Hoy» en nuestra Iglesia Particular, para mejorar nuestro servicio al mundo y pidió a las comunidades que animen y motiven la participación.

«Que tengamos un mismo sentir, que el mundo no nos asuste, no nos agobie y sea para nosotros el desafío de decir Jesucristo esta vivo. Que esta palabra resuene, y cada persona al escucharlo sienta que su vida tiene sentido, que es valiosa y que es amada. Eso es fundamental para la dignidad humana y para la fraternidad, que tanto necesita este tiempo», expresó nuestro Padre y Pastor.

Damos gracias por todo lo vivido en este encuentro y ponemos en las manos de nuestra Madre, de las Mercedes y de Luján, nuestro Sínodo Arquidiocesano.

Videos relacionados:

La homilía del Obispo Jorge

La primer parte del Encuentro

La segunda parte del Encuentro

«El secará todas sus lágrimas, y no habrá más muerte, ni pena, ni queja, ni dolor, porque todo lo de antes pasó» (Apoc. 21,4)

LAS HERMANAS DEJESÚS POBRE, NOPODEMO SER INDIFERENTES AL SUFRIMIENTO DE LOS  HERMANOS Y HERMANAS QUE SUFREN, COMO JESÚS NOS ENSEÑA A CADA INSTANTE.

REFLEXIÓN DE LA PALABRA DE ESTE FIN DE SEMANA

P. Ricardo – 22/6/2025

REFLEXIONES VARIAS

AGENDA

DÍAS Y HORARIOS

Secretaría:
Miércoles y Viernes: 15:30 a 18:00 hs
Cáritas:
Martes y viernes de 15:00 a 17:30 hs
Misas en la Parroquia:
Miércoles a Sábados: 18.30 hs
Domingos: 10 hs

I SÍNODO ARQUIDIOCESANO – DOCUMENTO FINAL

3 MINUTOS DE RETIRO

MENSAJES DIARIOS DEL PAPA LEÓN XIV

22/6/2025

Cristo es la respuesta de Dios al hambre del hombre, porque su cuerpo es el pan de la vida eterna. Cuando nos alimentamos de Jesús, pan vivo y verdadero, vivimos para Él. Ofreciéndose sin reservas, el Crucificado Resucitado se entrega a nosotros, y de este modo descubrimos que hemos sido hechos para nutrirnos de Dios.

La guerra no resuelve los problemas, sino que los amplifica y produce heridas profundas en la historia de los pueblos, que tardan generaciones en cicatrizar. Ninguna victoria armada podrá compensar el dolor de las madres, el miedo de los niños, el futuro robado. ¡Que la diplomacia haga callar las armas! ¡Que las naciones tracen su futuro con obras de paz, no con la violencia ni conflictos sangrientos!

Hoy más que nunca, la humanidad clama y pide la paz. Es un grito que exige responsabilidad y razón, y no debe ser sofocado por el estruendo de las armas ni por las palabras retóricas que incitan al conflicto. Todo miembro de la comunidad internacional tiene la responsabilidad moral de detener la tragedia de la guerra, antes de que se convierta en una vorágine irreparable. No existen conflictos “lejanos” cuando está en juego la dignidad humana.

Continúan llegando noticias alarmantes desde Oriente Medio, sobre todo desde Irán. En este escenario dramático, que incluye a Israel y Palestina, corre el riesgo de caer en el olvido el sufrimiento diario de la población, especialmente de Gaza y los demás territorios, donde la necesidad de una ayuda humanitaria adecuada es cada vez más urgente.

En la Eucaristía el Señor acoge, santifica y bendice el pan y el vino que ponemos en el altar, junto con la ofrenda de nuestra vida, y los transforma en el Cuerpo y la Sangre de Cristo, sacrificio de amor para la salvación del mundo. Dios se une a nosotros acogiendo con alegría lo que le presentamos y nos invita a unirnos a Él recibiendo y compartiendo con igual alegría su don de amor.

En muchos países se celebra la solemnidad del Cuerpo y la Sangre de Cristo, el Corpus Domini, y el Evangelio De Hoy narra el milagro de los panes y los peces (Lc 9,11-17). Más allá del prodigio, el milagro es un “signo”, y nos recuerda que los dones de Dios, incluso los más pequeños, crecen más cuanto más se comparten.

INTENCIONES DEL PAPA

El Papa León XIV nos invita a profundizar nuestra relación personal con Jesús y a aprender de su Corazón la compasión por el mundo.