La imagen puede contener: texto¡Cómo confundimos hablar de Dios o hablar con Dios con estar llenos de Dios! No es lo mismo. No alcanza con nombrarlo ni con rezarle. La experiencia de tener a Dios en el corazón se manifiesta en obras.
Cuando actúas como Dios es porque Él está en tu corazón, sino queda prisionero en la lengua, en el decir, en el repetir oraciones.
Si querés saber si Dios pasó la «puerta de la lengua» y está en vos fijate cómo está tu capacidad de amar, especialmente con los pobres, los enfermos, los solos, los niños: los preferidos de Dios.
Si amas lo que Él ama, Él está en vos!!!!!

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